Patricia Skorsetz

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Soluciones Naturales para el Exceso de Mocos

Desde mi centro de terapias naturales en Madrid, te revelo algunas soluciones naturales, como plantas medicinales eficaces, que ayudan a expulsar el exceso de moco que acompaña a los resfriados, gripes y bronquitis.

La tos y los mocos, quien no los conoce. Son dos síntomas típicos de los resfriados o las gripes. El moco y la tos juegan un papel fundamental en la eliminación de los elementos irritantes e infecciosos del organismo, pero puede resultar molesto y desagradable. Para limitarlos, se puede buscar la ayuda natural de las plantas medicinales con propiedades expectorantes y mucolíticos.

En general, la mucosidad transparente se considera “normal” o saludable. Si uno se siente congestionado o con la nariz tapada, la mucosidad puede ser blanca. Así mismo, también podría experimentar hinchazón o inflamación en la nariz y un flujo lento de la mucosidad nasal. Estar congestionado hace que la mucosidad pierda su contenido de agua y se vuelve más espesa e incluso turbia. Ambas son señales de que puede haber un resfriado o una infección.

El moco y la tos tienen varias funciones importantes. Desde la Naturopatía los consideramos como aliados que tiene la misión de hacer de barrera defensiva de nuestro cuerpo. Gracias a la consistencia del moco, que es pegajosa, tiene la capacidad de atrapar los elementos extraños (virus, bacterias y partículas) que entran por la nariz.

Interesantemente, el moco está formado por casi 96% de agua, lo cual ayuda en mantener la humedad de ellas. Un adulto, normalmente, produce 1.5l – 2l de mocos al día. Probablemente la mayor parte de este moco la tragamos, donde se disuelve en el estómago. La otra parte se va expulsando al sonarse la nariz o con los estornudos. Y otra parte no se expulsa pero se queda en la nariz donde se seca.

Ante un ataque externo (alergia, virus, agentes infecciosos, algunos medicamentos) el organismo reacciona produciendo más moco para defenderse. Cuando la producción de moco aumenta, provoca congestión y, en ocasiones también irritación de la garganta. Al otro lado, el incremento de su viscosidad hace que a nuestro cuerpo le cueste eliminarlos e intenta hacerlo mediante la tos y la expectoración.

Los mocos, en sí mismos, no son dañinos si conseguimos mantener las vías respiratorias despejadas. Sí hay que estar atentos por sí coinciden con otros síntomas como por ejemplo la dificultad para respirar, fiebre, color de moco o si los mocos duran más de 10 días y no hay mejora.

Por ejemplo, la mucosidad amarilla es una señal de que hay algún tipo de virus o infección. La buena noticia: este mecanismo del cuerpo se está defendiendo. El color amarillo proviene de células, como los glóbulos blancos, que combaten los gérmenes dañinos y una vez que las células han hecho su trabajo, se eliminan en el moco y tornándose de color marrón amarillento. Y si el sistema inmunológico necesita combatir una infección, los mocos podrían volverse verde y aún más espesa.

La textura de la mucosidad tiene mucho que ver con su contenido de humedad. La mucosidad nasal que fluye libremente tiene más contenido de agua que la mucosidad firme. En algunos casos, beber más agua puede ayudar a diluir la mucosidad. Cambios en la textura pueden surgir durante el transcurso de una enfermedad.

RECOMENDACIONES PARA ELIMINAR EL EXCESO DE MOCO

  • HIDRATACIÓN: Mantenernos bien hidratados es importante y beber mucha agua, al menos ocho vasos por día, ayuda a diluir la mucosidad, hace que sea más fácil sonarnos la nariz y nos protege frente a las infecciones y ayuda a disolver la mucosidad. Las infusiones con plantas medicinales de acción pectoral como el tomillo, el orégano, la amapola o la malva son una buena forma de aportar y si además se endulzan con miel, añadimos los efectos balsámicos, suavizantes y antitusivos para nuestras vías respiratorias.
  • HUMEDAD DEL AMBIENTE: La calefacción y el aire acondicionado excesivo resecan el ambiente y, por lo tanto, nuestra mucosa. Sería conveniente colocar algún recipiente con agua (humificador) en las habitaciones para mantener una humedad adecuada. Además se pueden añadir plantas con acción antiséptica respiratoria y balsámica como el eucalipto o el tomillo.
  • DIETA SALUDABLE Y EQUILIBRADA: una dieta equilibrada ricas en vitaminas y minerales, tiene una gran importancia en el mantenimiento del buen estado del aparato respiratorio y del sistema inmunitario.
  • EVITA cambios bruscos de temperatura, así como lugares con una escasa ventilación, o con mucho polvo (obras), etc.
  • LAVADOS NASALES con solución salina o de agua de mar que no contiene medicamentos: Delante el lavabo, inclina el cuerpo ligeramente hacia adelante y la cabeza ligeramente hacia un lado. Respira despacio por la boca y vierte el agua por una fosa nasal para que la solución salina salga por la otra. Repite en el otro lado. Después, suénate bien la nariz.

AYUDAS NATURALES PARA LA SALUD RESPIRATORIA

Hay una gran variedad de plantas medicinales y ayudas naturales que por su acción antitusiva, expectorante, antiséptica y broncodilatadora se pueden utilizar en las afecciones del aparato respiratorio. Entre las que ayudan en caso de tos y mucosidad, están las siguientes:

  • Gordolobo (Verbascum thapsus L.): Las virtudes pectorales de esta planta ya eran conocidas en la Grecia clásica por Hipócrates y por Discórides. Contiene mucílagos, lo que le proporciona una acción emoliente (suaviza los tejidos), saponinas que favorecen la expectoración y flavonoides que le otorgan un efecto antiinflamatorio
  • Tomillo (Thymus vulgaris L): Esta planta aromática contiene aceite esencial al que debe la mayoría de sus efectos: relajante sobre la musculatura de las vías respiratorias, antiséptico respiratorio y calmante de la tos.
  • Eucalipto (Eucalyptus globulus L.): Es una de las plantas más efectivas que se conocen para tratar las afecciones respiratorias. Posee propiedades antisépticas respiratorias, balsámicas y expectorantes, facilitando la expulsión de moco y calmando la tos.
  • Llantén (Plantago lanceolata): Debido a su excelente acción emoliente y suavizante ejerce un efecto calmante sobre la mucosa respiratoria, aliviando la inflamación de garganta. También tiene acción antialérgica.
  • Propóleo: esta sustancia, elaborada por las abejas, posee múltiples propiedades preventivas y terapéuticas. Es antibiótico, antiviral, antiséptico, cicatrizante, antiinflamatorio, inmunoestimulante, ligeramente analgésico, antioxidante y revitalizante.

Advertencia: Es importante recordar que la Dirección de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) no supervisa las hierbas ni los suplementos. Las personas que quieren usar remedios naturales para tratar la tos y los mocos deben buscar siempre recursos y marcas confiables y nunca arriesgarse a utilizar productos de baja calidad. También deben ser conscientes de que algunas hierbas y suplementos pueden interferir con los medicamentos, lo que puede provocar efectos secundarios no deseados. Si presenta una tos grave y/o persistente durante ya algunas semanas, es esencial que consulte a un médico.

Si tienes alguna duda sobre ti mismo, tu enfermedad o la de alguno de tus familiares, ponte en contacto conmigo, estaré encantada de ayudarte en lo que necesites. Reserva tu cita hoy mismo y recuerda que también puedes seguirme en mis redes sociales donde iré compartiendo información de utilidad.