Patricia Skorsetz

estrés

Lavando Nuestro Estrés: Cómo una Ducha Puede Reiniciar Nuestro Día

¿Tienes uno de esos días? Cuando la idea de acurrucarte en la cama con helado y Bravo TV te llama, podrías encontrar un salvador inesperado en tu grifo. En esta entrada del blog hablaré de algunas cosas interesantes que Vicky Vlachonis, una osteópata de Beverly Hills, explica en su libro El cuerpo no miente y cómo un enjuague rápido puede hacer mucho más que solo limpiar nuestro cuerpo. Bañarse —ya sea una ducha, un baño o simplemente lavarse las manos— puede liberar estrés, culpa e incluso dolor muscular. Usa estos secretos para sentirte bañado en calma.

Yo soy Patricia Skorsetz, y te explicaré los motivos por los que una ducha o simplemente lavarnos las manos, puede hacer que disminuya nuestro estrés.

Envía tus problemas por el desagüe

Debido a que es un ritual que (generalmente) disfrutas en soledad, bañarse es un momento ideal para abordar lo que te está molestando. Un estudio de la Universidad de Michigan encontró que tomar una ducha ayuda a las personas a desprenderse de sentimientos de duda o arrepentimiento, ya que mentalmente asociamos el acto de lavarnos con la purificación y el alivio.

Mientras te bañas, cierra los ojos e intenta sentir tu enojo o dolor. ¿Está atascado en tu hombro izquierdo? ¿En tu cuello? Deja que el agua tibia penetre ese lugar y observa cómo tus músculos se relajan. De la misma manera en que tus músculos dejan ir el estrés, tu mente también lo hará. Al terminar, visualiza que la tensión desaparece por el desagüe junto con la suciedad del día. No solo es la suciedad que vemos con los ojos la que se va por el desagüe, sino también la energía negativa.

Por supuesto, no puedes meterte en la ducha cada vez que te sientes abrumado, ¡y especialmente no en el trabajo! Si acabas de recibir el correo más irritante del mundo, ve al baño para lavarte las manos. El estudio de Michigan encontró que frotarte las manos puede ofrecer los mismos beneficios mentales que una ducha. Nuevamente, como un ritual personal, cierra los ojos mientras enjuagas tus manos, intenta conectarte con tu cuerpo e imagina que el agua se lleva la tensión y te da un nuevo comienzo. Volverás a tu escritorio con una reserva de energía positiva.

Cambia el ritmo

Simplemente moviendo la perilla de la ducha también puedes llenarte de energía. «Alternar entre temperaturas calientes y frías durante tres minutos en tu ducha matutina despierta tu sistema. Empieza con agua caliente y termina con agua fría, cambiando cada 30 segundos. Tus vasos sanguíneos se expandirán y contraerán, mejorando tu circulación. Un golpe de agua fría también estimula el área de tu cerebro que libera noradrenalina, un antidepresivo natural. Eso significa que dejarás las hormonas del estrés atrás y comenzarás tu día con el pie derecho (recién lavado).»

Te invito a conocer mi espacio de consulta. Ponte en contacto conmigo, estaré encantada de ayudarte en lo que necesites. Reserva tu cita hoy mismo y recuerda que también puedes seguirme en mis redes sociales donde iré compartiendo información de utilidad.

Soy Patricia Skorsetz y te ofrezco una Sesión Gratuita (15mins) para poder valorar el estado de tu bienestar y cómo te puedo ayudar. Puedes contactarme al siguiente número: 690 775 227 o  agendar tu cita de Naturopatía hoy través de mi página web.